Juan Antonio González Moreno, presidente y director general de Gruma, realizó en 2019 las compras necesarias de materia prima, incluso maíz nativo de agricultores de Guerrero, Oaxaca y Puebla, para garantizar que no subirá en México el precio de la harina que produce durante la pandemia sanitaria. No es lo único, cuenta con mil 200 millones de dólares en líneas de crédito para fortalecer su liquidez.

El líder mundial en producción de harina de maíz y tortillas procesa 2.5 millones de toneladas de maíz en México y tiene coberturas para todo el año. En EU, según Nielsen US Fresh Baked Goods, la demanda de tortillas por la pandemia superó a la de pan. Al cierre de marzo las ventas interanuales de Gruma subieron 47.8 por ciento y las de Bimbo 24.5 por ciento.

Otras empresas han buscado crédito para fortalecer su liquidez o modificado sus política de dividendos y recompra de acciones. Fibra Uno, el mayor fideicomiso de inversión en bienes raíces en México, y Fibra HD, presididas por Héctor Madero Rivero, informaron lo siguiente: el primero dispuso de 50 por ciento de su línea de crédito revolvente vinculada a la sostenibilidad de “manera inmediata”, lo que representa 6 mil 750 millones de pesos “para asegurar la continua y estable operación” frente a la pandemia, y el segundo suscribió con BBVA Bancomer un crédito por 500 millones de pesos para enfrentar el impacto del covid-19.

Fibra Hotel, que dirige Simón Galante, informó que tiene en caja casi mil millones de pesos al 1 de abril, que incluyen dos líneas de crédito por 366 millones de pesos para atender en el corto plazo cualquier contingencia, mientras que Gentera, grupo líder en inclusión financiera que preside Carlos Danel Cendoya, dijo que se propondrá en la asamblea de accionistas “no decretar ni pagar dividendos por el ejercicio 2019, así como suspender el uso del fondo de recompra hasta nueva fecha” frente a las condiciones que prevalecen en el mercado.

FibraShop, especializado en centros comerciales que encabeza Diego Damián Folino, modificó su política de distribución de dividendos para “agregar flexibilidad financiera y liquidez”, y cada trimestre se determinará el pago conforme evolucione el mercado. Terrafina, que también preside, retiró 150 millones de dólares de su línea de crédito revolvente como un “plan de contingencia para blindar las operaciones”; tiene inquilinos multinacionales principalmente dedicados a la manufactura.

Las autoridades hacendarias y financieras de México anunciaron un esquema de liquidez bancaria, lo que facilitará los apoyos ofrecidos a usuarios de servicios financieros para que paguen sin presión ante la emergencia. Así se evita que la falta de liquidez se transforme en problemas de insolvencia, dice el FMI. Carajo, así de simple. 

Ver Nota