Las compañías de seguros trabajan continuamente para mejorar la velocidad de comercialización de sus productos; sin embargo, hasta que no logren digitalizar a sus agentes no se adaptarán al actual entorno del mercado que cada vez demanda más oportunidades por medio de canales digitales.

Así lo cree Capgemini, empresa especializada en servicios de consultoría, transformación digital y tecnología. La firma sostiene que se necesitarán herramientas y productos digitales, además del reemplazo de procesos y sistemas para así optimizar la interacción tanto con asesores como con clientes, todo ello a medida que cambian las preferencias de consumo.

En su informe, la consultora indica que los clientes están inclinados a trabajar con su agente en persona, pero mencionan que este proceso ha cambiado considerablemente a causa de la pandemia de COVID-19, lo que obligó a las compañías a permitir a sus distribuidores ventas y servicio al cliente de forma exclusivamente digital.

En tal sentido, agregan que los intermediarios están aumentando su propuesta de valor y construyendo mejores conexiones con el cliente a través de herramientas tecnológicas, pero solo pueden lograrlo cuando la compañía aseguradora los respalda.

El reporte también explica que lo digital es solo una parte de la solución, ya que las ventas y el servicio digital deben estar habilitados por productos que sean más simples, más didácticos para el cliente y más fáciles de comprar.

Por último, el estudio de Capgemini asegura que la evolución de los productos ya comenzó y la COVID-19 fue un impulso. A ello, añade, se deben sumar los cambios demográficos, porque hay generaciones enteras que prefieren las interacciones digitales a las humanas y eso ha orillado al mercado a adaptarse rápidamente.