AM Best espera que las compañías de seguros de México sigan siendo capaces de cumplir con los requisitos de capital regulatorio a pesar de una caída en la calidad crediticia de sus inversiones de renta fija, que está siendo impulsada por acciones sobre la calificación y las emisiones de deuda soberana del país. 

Un nuevo análisis de calificadora, denominado La capitalización de la industria aseguradora mexicana sigue siendo sólida en medio de cambios en la calidad del crédito de inversión, señala que AM Best revisa y monitorea periódicamente la capitalización de la industria aseguradora mexicana en su conjunto. 

En vista de los eventos sin precedentes de 2020 y la perspectiva de un año desafiante debido a la incertidumbre impulsada por la pandemia, es probable que los perfiles crediticios de las empresas estatales sigan bajo presión, detalla el reporte.

Asimismo y en opinión de AM Best, los niveles de capital de las compañías de seguros de México se mantienen sólidos a pesar de la exposición al deterioro de las obligaciones cuasigubernamentales, lideradas por Petróleos Mexicanos (Pemex), que registró una pérdida de 23,000 millones de dólares en 2020, y la Comisión Federal de Electricidad, empresa de servicios públicos estatal,, que está a un escalón del grado de no inversión. 

Además, el entorno de bajas tasas de interés continúa desafiando las capacidades de gestión de activos y pasivos de las aseguradoras de Vida, presionando sus productos financieros.

Las pruebas de estrés adicionales de la exposición asumida de la industria a empresas estatales en niveles sin grado de inversión aún muestran una capitalización ajustada al riesgo general en los niveles más fuertes, según el índice de adecuación de capital de AM Best. Además, las asignaciones actuales de renta fija de las aseguradoras locales destacan una creciente diversificación hacia empresas, valores vinculados a la inflación e instrumentos dolarizados.