En los últimos dos años los desahucios por impago de alquiler se han convertido en una preocupación para los arrendadores. Son numerosos los casos de inquilinos que, por diferentes razones, dejan de pagar sus alquileres a los propietarios pero siguen viviendo en la propiedad.

Por esta razón, cada vez son más los propietarios que están optando por contratar seguros de impago del alquiler. Estos seguros cubren las mensualidades que el inquilino no pague durante el proceso de desahucio y muchas otras prestaciones que varían de una aseguradora a otra. Veamos cómo puede ayudar en esta situación contar con un seguro de este tipo a los propietarios y cómo elegir el mejor seguro:

¿Qué cubre un seguro de impago de alquiler?

Un seguro de impago cubre determinadas situaciones y ofrece múltiples ventajas a los propietarios. Veámos las más comunes:

Cobertura total ante impagos. Protege al propietario ante el riesgo de impago del alquiler. En la póliza se suele establecer un periodo determinado de rentas cubiertas que garantice el cobro del alquiler durante los meses que sean precisos para desalojar a un inquilino por vía judicial.

Servicio de gestión de cobros. Un seguro también puede ofrecer la gestión de cobros de las mensualidades del alquiler. De esta manera, el propietario puede olvidarse de estar pendiente de los cobros y de reclamar los retrasos al inquilino.

Cobertura por daños inmuebles. En algunos casos,  los seguros por impago de alquiler también pueden indemnizar al propietario por daños y desperfectos al inmueble. Así pues, si el inquilino moroso maltrata deliberadamente el piso durante el proceso de desahucio el seguro puede cubrir la totalidad o parte de las reparaciones.

Gastos de suministro y por desahucio. Algunos seguros de impago también cubren los gastos de suministros de luz y agua a cuenta del inquilino cuando éste deja de pagarlos. Además, otros incluyen la gestión de las acciones y costes de desahucio para recuperar la posesión de la propiedad.