Uno de los sueños de muchos mexicanos es obtener un espacio propio, ya sea un departamento o una casa y al obtenerlo es fundamental asegurar que nada malo le ocurra a tu inmueble. Ante esto es necesario contar con un seguro de arrendamiento y si aún no estás convencido, entonces debes conocer los beneficios.

Algo que debes tomar en cuenta es que hay ocasiones en las que la adquisición de un inmueble, implica que este pueda rentado para obtener un ingreso pasivo y así los arrendadores cuenten con dinero extra, de acuerdo a la Condusef.

En la revista Proteja su Dinero de junio de la Condusef, si es que pretendes rentar tu departamento o casa, obtener seguros de hogar para arrendadores son una alternativa de protección que está al alcance de quien esté interesado para proteger su patrimonio y arrendarlo sin preocupaciones.

¿Sabes lo que es un seguro de arrendamiento?

Son conocidos como productos que las aseguradoras se encargan de ofrecer a sus clientes con el propósito de que haya un respaldo cuando el inquilino no cumpla con las responsabilidades que le corresponden como la reconexión de servicios o daños que le haya generado a la vivienda.

¿Qué cubren los seguros de arrendamiento?

Entre los principales riesgos de los que protege el seguro de arrendamiento son los siguientes:

Incendios

Explosiones

Inundaciones

Terremotos

Robo

Vandalismo

Caída de objetos y estructuras

Rayos

Erupciones volcánicas

Granizo y nieve

Derrames químicos

Fugas de agua

Otro riegos que el seguro de arrendamiento se encarga de cubrir es que el arrendador se enfrente a posibles impagos de renta por parte de los inquilinos, así como problemas jurídicos y legales que sean generados por la negativa al desalojar el inmueble cuando se les solicita.

¿Cuáles son las coberturas del seguro?

Son diferentes tipos de seguros para arrendadores y coberturas, pues cada persona y hogar cuenta con necesidades completamente distintas. En cuanto a las coberturas del hogar se encuentran:

Seguro del Hogar: Se encarga de proteger la construcción contra todo tipo de siniestros que puedan generar daños o pérdida total de la casa.

Daños a Tercero: Protege los daños a los inquilinos, vecinos o para personal que trabaje en la propiedad en caso de que sean afectados por un accidente que sea tu responsabilidad como arrendador.