La salud es uno de los elementos más importantes de nuestra riqueza NO financiera. La frase: Sin salud no hay nada es sumamente cierta. 

El detalle es que cuidar nuestra salud no nos exenta de sufrir accidentes, tener herencias familiares no deseadas como problemas de salud hereditarios, o que incluso el ambiente no sea propicio para que, aunque nos cuidemos, no nos lleguemos a enfermar (¿Pandemias?).

Los seguros de gastos médicos mayores, como su nombre lo indican, son productos financieros "seguros" que ante la eventualidad o riesgo de llegar a necesitar una atención médica hospitalaria "gasto médico mayor", podamos contar con los recursos económicos para cubrir esas cuentas de hospitales, honorarios médicos, medicamentos, tratamientos y todo aquello que sirva para recuperar nuestra SALUD.

Lamentablemente no son productos que tenga muy buena penetración en la población mexicana, porque de acuerdo a datos de la CONDUSEF, menos del 10% de la población tiene uno de estos seguros, y algunos son incluso otorgados mediante una prestación laboral.

Hoy más que nunca, debemos considerarlos dentro de nuestro presupuesto.

Justamente la pandemia ha puesto en una situación adversa a las familias mexicanas, ya que no contar con la atención médica oportuna durante los años 2020 y 2021, hubo muchos fallecimientos. Los que llegaron a hospital, tuvieron que pagar gastos promedio a los $522 mil pesos (AMIS - Mayo 2022).

Eso sin contar que los gastos más usuales que cubren los seguros médicos incluyen los tumores y cáncer, padecimientos cardíacos, complicaciones del embarazo y recién nacido, así como los accidentes (México tiene gran índice de accidentes vehiculares de consideración).

Siempre será más fácil cubrir el gasto de un deducible que las cuentas hospitalarias millonarias.

Lo que debes saber de un Seguro de Gastos Médicos Mayores:

1. Suma asegurada.

Es la cantidad que, de acuerdo a la cáratula de la póliza, será la aseguradora la que cubrirá ante una enfermedad o accidente. En algunos casos, esa suma asegurada será por padecimiento y podrás contratarla por más de $100 MILLONES de pesos.

2. Deducible y coaseguro.

Deducible es el monto que tiene que cubrir el asegurado y que después de esa cantidad se considera como gasto médico mayor. El coaseguro es un porcentaje que cubre el asegurado de la cantidad restante cubierta por la aseguradora al restarle el deducible. A mayor deducible y coaseguro, mayor participación del asegurado y por ende, menor costo de tu prima de seguro.

3. Tabuladores médicos.

Son los costos promedio que establecen las aseguradoras para padecimientos, tratamientos, cirugías y costos de consultas de médicos especialistas.

4. Nivel hospitalario.

Existen varios niveles de hospitales, y puedes elegir el que mejor te convenga. A mayor nivel hospitalario, habrá mayor cobertura de hospitales.

5. Coberturas adicionales.

Eliminación de deducible por accidente, cobertura dental premium, viajes al extranjero, maternidad extendida (mayor suma indemnizatoria), entre otras coberturas, podrás elegir al diseñar tu seguro.

6. Preexistencias.

Son enfermedades o padecimientos declarados que tienes o has presentado ANTES de haber contratado tu póliza de seguro. Estos padecimientos pueden ser NO cubiertos por tu seguro, o pueden tener un tiempo de espera diferente.

7. Padecimientos con tiempo de espera.

Son padecimientos que NO serán cubiertos de forma inmediata al contratar tu póliza. Puedes ver en las condiciones generales de cada aseguradora (documento público en portales de cada una) para conocer algunos de estos padecimientos.

8. Exclusiones.

Son aquellas condiciones, coberturas o procedimientos que las aseguradoras no cubrirán de ningún modo. Ejemplo: tratamientos estéticos.

La recomendación para contratar un seguro de gastos médicos mayores es simple: Hazlo ahora que estás sano o sana. Hazlo mediante la asesoría de un agente de seguros y que cuenten con el respaldo para apoyo al seguimiento de siniestros.